Tras ocho años de trabajar en redacción creativa y persuasiva, he descubierto y utilizado decenas de fórmulas de copywriting. Al respecto, me parece que la gran mayoría de personas tiene una idea equivocada sobre ellas: las imaginan como generadores automáticos de textos cuando, en realidad…
¿Su empresa ha utilizado alguna vez una carta de ventas? Es probable que no, sobre todo en esta era digital… o bueno, tal vez sí, pero ahora en forma de un correo electrónico para darle seguimiento a un buen prospecto, por ejemplo, o también en forma de una página de ventas o landing page.
Su nombre completo es Storybrand 7 Part Framework y está contenido en el libro “Building a story brand” de Donald Miller. También se le conoce como esquema SB7, en caso de que prefiera un nombre mucho más corto y simple 😉.
Una de las cosas que más me gusta de todos los libros sobre copywriting que he leído hasta hoy (¡ya llevo más de 20 años haciéndolo!) es que están repletos de historias sobre cómo las palabras han comunicado el valor de las marcas de forma diferenciada e irresistible.
Por tanto, para esta entrada el blog he elegido una de esas anécdotas, una de mis favoritas. Y los protagonistas son excepcionales: Steve Jobs y el iPod.
En el calendario editorial de mi blog tenía un tema muy diferente programado para el mes de marzo; peeeeeeero se nos atravesó el COVID-19 y pues, todo cambió. Y creo que, por ahora, tanto en lo personal como en lo profesional, es difícil saber la forma correcta de responder cuando nunca antes habíamos experimentado una situación semejante.
Sin embargo, le comparto este post con la intención de apoyarle, aunque sea un poquito, para inspirar la creación de contenidos efectivos en estas circunstancias. Sin la intención de ser oportunista y mucho menos insensibles, es un hecho que las empresas necesitan seguir vendiendo; no obstante, sus mensajes y la forma de transmitirlos deben trabajarse con mucho más cuidado, con total empatía.
En el penúltimo post del 2019 quiero compartirle lineamientos generales sobre el copywriting para Instagram. Sí, para tener buena presencia en esta red social también hay que escribir… aunque sea un poquito.
Con mucha frecuencia, los titulares son lo único que vemos y, en función de ellos, decidimos si continuamos consumiendo el resto del contenido o no. Por ese motivo, es tan importante crearlos aplicando fórmulas de probada eficacia como las que le comparto a continuación.
Así como disfruto leer a Rosa Montero cuando se trata de ficción; ella es mi favorita a la hora de leer sobre creación de contenidos. Me refiero a Ann Handley, “la primera persona en el mundo en tener el título de directora de contenido”, de acuerdo con el sitio web oficial del libro del que quiero hablarle en este post.
711,000 resultados. Antes de comenzar a escribir este post busqué en Google ¿qué hace un copywriter? y vi que hay más de 711,000 resultados para dicha keyword. Luego lo hice en inglés, “what does a copywriter do” y resulta que hay casi 16 millones de resultados. ¡Una gran diferencia!
El domingo 21 de abril se conmemoró por 17º año consecutivo el Día Mundial de la Creatividad y la Innovación. Este tema se ha vuelto muy común en los círculos empresariales y de emprendedores y debo reconocer que a mi me encanta. Y por eso, desde principios del año, ya lo había incluido en mi lista de temas a abordar en este blog.