Mi gran descuido durante 4 años como emprendedora

Si alguien del futuro me hubiera dicho en septiembre de 2013 todo lo que iba a vivir, aprender y desaprender siendo emprendedora creo que no se lo hubiera creído. ¡Comenzando por el notición de ser mamá al mismo tiempo!

Definitivamente, muchos cambios y experiencias no estaban en mis planes. Solo ocurrieron, los manejé lo mejor que pude y ahora, tal como lo he hecho los últimos 3 años, escojo el mes de aniversario de la Trastienda para dar gracias por TODO y compartirle una reflexión muy personal sobre alguna de las muchas lecciones que me está dando esta etapa de mi vida.

Así que hoy quiero hablarle de cómo comprobé que el “multitasking” NO existe. Durante los 14 años de mi experiencia profesional antes de enfocarme en el copywriting y a la creación de contenidos tuve trabajos muy demandantes, que casi me anularon como persona. “Sin querer queriendo”, como decía el Chavo del ocho,  aprendí a manejar varios proyectos a la vez, incluso varios cargos al mismo tiempo, y me habitué a sentir el corazón asomándose por la boca con demasiada frecuencia.

Y cuando por fin pude dedicarme al área de las comunicaciones que más me gusta, el hábito me empujó a seguir haciendo lo mismo: reuniones que se traslapaban y laaaargas jornadas para investigar, leer y crear; todo combinado con múltiples tareas administrativas, mandados de la casa y actividades relacionadas con el cuidado de mi hijo (¡las mamás emprendedoras saben muy bien lo difícil que es!)… hasta que mi cuerpo me dio un buen susto.

Así que en enero de 2016 tuve que comenzar a explorar el “singletasking” y el  “mindfulness”. Y la exploración sigue aún pues tengo costumbres muy arraigadas de la época en la que me descuidé de mí misma casi por completo.

Ya tenía ciertas nociones de manejo efectivo del tiempo tras leer “Getting things done” que marcó un hito en 2001, cuando se publicó por primera vez. Justo ahorita, mientras escribo esta idea, me doy cuenta que muchas de mis vivencias personales y profesionales están marcadas por los libros que he leído jejejeje… por tanto, este tema, no podría abordarlo de otra manera.

Algunos de los consejos más destacados que entresaqué de dicha publicación son:

  • Nuestro cerebro no es bueno para almacenar cosas ni recordar compromisos. Por eso hay que anotar todas las tareas y hacer listas.
  • Hay que identificar en qué y para qué quiere invertir su tiempo hoy, mañana, durante la semana, el mes; así como aquello que puede esperar o incluso delegar.
  • Comenzar cada día con una pequeña rutina de “priorización”.
  • Adquirir el hábito de fijar límites de tiempo para el desarrollo de cada tarea.
  • La regla de los 2 minutos: Si puede hacer algo en 2 minutos… ¡hágalo YA! Es el tiempo que le tomaría anotarlo y planificarlo, así que es mucho mejor hacerlo inmediatamente.
  • ¡Premiarse! Incluso por los más pequeños logros y cumplimientos. De esta manera mantendrá un saludable balance entre trabajo y juego.

Pero estas lecciones aunque sí me han funcionado muchísimo, no han sido suficientes.

En el aprendizaje del “singletasking” me ha acompañado el libro homónimo de Devora Zack, que complementa su título con la siguiente exhortación: “Get More Done-One Thing at a Time” / Haga más cosas, una cosa a la vez. Y también le recomiendo este artículo de Forbes de 2013. Y como dato curioso le cuento que en Estados Unidos hasta hay un día para conmemorar el “singletasking”, que este año fue el 22 de febrero.

Y con respecto a la llamada “atención plena” aún sigo buscando EL libro ideal para mí. Así que si puede recomendarme alguno se lo agradeceré. Mientras tanto, sí tengo en el radar una idea básica al respecto: “Tu cuerpo siempre está en el presente. ¿Y tu mente?”… ¿Qué le parece? Además, me gusta mucho este sitio del Reino Unido, Bemindful. Y a propósito de ellos, le recomiendo que si en este momento tiene un par de minutos (2, por ejemplo) tome su test del estrés. ¡Su salud mental y emocional lo vale!

Por hoy no me queda más que comentarle que, al echar la vista atrás, puedo reconocer que el manejo del tiempo es, en esencia, un cambio de hábitos y, a la vez, una habilidad IMPRESCINDIBLE (aunque desestimada en nuestro mundo de hoy) para estar un poco más tranquilos. Después de todo, a pesar de los múltiples avances de la ciencia y la tecnología, cada día sigue teniendo solo 24 horas y la vida que tenemos ahora solo podemos disfrutarla una vez.

¡Hasta la próxima!

 

 

Compártalo en sus redes…

¡Únase a la primera comunidad de copywriting en El Salvador!

Con su suscripción recibirá:
  • El ebook “Copywriting rápido y efectivo: Cree TODO tipo de contenidos contestando sólo 5 preguntas”
  • Información actualizada y práctica sobre redacción creativa y estratégica todos los últimos viernes de cada mes, directamente en su bandeja de entrada. ¡Garantía de cero spam!